sábado, 6 de octubre de 2012

Hijos mios, tenéis lo que os merecéis

Dicen las encuestas que en Galicia el PP renovaría su mayoría absoluta.

Es asombroso como un partido que sistemáticamente miente, que engaño en las generales y en cada comicio y en cada acto público en el que se presentan, es capaz de mantener una mayoría de apoyos entre la ciudadanía, aunque ahora llame mas la atención que el ladrón de bancos, Mario Conde pueda ser parte de la cámara legislativa gallega, defendiendo que los políticos creen que el dinero publico es suyo... como si él…Sin comentarios.

Un partido, que además, día tras día nos demuestra con sus dichos y sus actos el verdadero carácter que esconden tras un disfraz supuestamente democrático.

Ayer, saltaba la noticia de que el asesor del gobierno para asuntos de inmigración, José Manuel Castelao, un gallego para mas señas, en foro publico se atrevió a decir que las leyes, como las mujeres, están para violarlas... ¡Ole por el personaje!

Difícilmente veremos acciones recriminatorias por parte de quien le nombro para el efímero cargo, en el que solo ha permanecido un día... Afortunadamente.

Este es solo un ejemplo del sentir, entiendo que generalizado, de quien maneja actualmente el poder en España, o así lo parece viendo su nula respuesta ante tamaña barbaridad.

Me recuerda esta frase a una que dijo algún día Adolf Hitler, a pocas fechas de desencadenar el mayor conflicto bélico de nuestra historia, cuando dijo que los tratados internacionales se firmaban para poder romperlos.

Adolf es sin duda un personaje admirado entre esta gente que se las da de modernos y democráticos (de boquilla), pero que ataca el sistema con todas sus fuerzas, que critica los actos de justicia de los jueces cuando no les gustan. Y que cuando disiente de la opinión de otros u otros disienten de la suya, envía a los cuerpos de seguridad a reprimir incluso los derechos mas esenciales protegidos por nuestra constitución.

Hay un sindicato (que dicen ellos que son un sindicato, y se acercan mucho a lo que en la vida real se llaman sindicatos del crimen, mafias y corrupción) llamado Manos Limpias, que ya en su nombre contiene una enorme errata. Deberían llamarse "Manos Sucias", ya que normalmente se meten en fanguizales que no les competen y remueven cualquier mierda que encuentran con tal de demostrar el poder fáctico de quienes les apoyan y durante mucho tiempo, que no ahora, se han manifestado por las calles de España en protestas contra el aborto, las uniones entre personas del mismo sexo, contra la ley de memoria histórica, contra la educación para la ciudadanía y contra cualquier acto, postura o hecho que huela a verdadero progreso democrático. Estos son los que consiguieron expulsar al juez Garzón de la carrera judicial y los que ahora atacan al juez Pedraz...

Y los de la confederación española de policía (CEP) van y denuncian a tres diputados de izquierda por injurias, por decir públicamente lo que todos sabemos, que los disturbios de las manifestaciones de estos días las han iniciado agentes camuflados de la policía, que sus ataques y cargas contra los ciudadanos que ejercían su derecho a la protesta fueron desmedidas, innecesariamente violentas y cruentas. Seguramente, los de las manos sucias, o al menos si tienen sucios sus pensamientos, se personarán en la denuncia, como lo hacen últimamente casi contra cualquiera que defienda posturas razonables y lógicas...

Estos, junto con nuestros gobernantes, que no se expresan contra frases como la conocida ayer, o que demuestran con sus posturas su verdadera sangre fascista (en frases como la de Mayor Oreja cuando dice que no se resigna a la actual ley del aborto y que peleara para conseguir su retirada, o a la de Morenes llamando "pijo ácrata" a un juez que dicta sentencias contra su parecer, o en no comentar el desatino del obispo de Córdoba cuando compara el aborto al asesinato de dos niños por parte de su padre con premeditación y alevosía), son los que se encargan de recordarnos en cada acto, en cada situación por quienes estamos gobernados, que quieren hacer con nuestra sociedad y cuales son los fines que persiguen. Ellos y la prensa afín al gobierno, que ha pasado de ser prensa amarilla a ser prensa color mierda…

Estos fines no son mas que el sometimiento del pueblo, la "cristianización" de nuestra sociedad, la censura y la eliminación de derechos sociales. Convertir nuestro país en una sociedad feudalista, de señores y lacayos, de ricos y tremendamente pobres, donde espero que no se atrevan (aunque en el fondo lo deseen) a imponer derechos feudales como el pernada, que tan bien le vendría a alguno de ellos y que tanto seguramente añoran...

Pues aun así, a pesar de ser los causantes de la situación de hambre de muchos españoles y sobre todo de muchos niños españoles, a pesar de haber mentido descaradamente incluso en la presentación de unos presupuestos incumplibles, falsos ya en su concepción, a pesar de haber destrozado la sanidad universal que disfrutábamos, a pesar de intentar reeducarnos en selectos colegios de pago (a los que puedan permitírselo), a pesar de haber llevado el paro a cifras desgraciadamente agigantadas, a pesar de no hablar del recorte de las pensiones, que será lo que hagan en cuanto consigan "su mayoría" en Galicia, a pesar de negociar un rescate del que no conocemos sus maldades, a pesar de gritar orgullosamente el amparo de los que no oyen gritar en las calles (esa mayoría silenciosa que tanto le gusta a Rajoy), después de dar la espalda al pueblo y maltratarlo, vencerán en las autonómicas.

Dijo en una ocasión Julio Anguita "Hijos míos, ¡tenéis lo que os merecéis!"

Empiezo a pensar que es cierto el aserto. Tenemos lo que nos merecemos

Si no hay una respuesta contundente en las urnas contra el despotismo de esta gente, se convertirá en cierto.

Hoy, la campaña es que no ganen, que vean disminuida su fuerza política para que forzosamente tomen conciencia de que no vamos a soportar más el fascismo imperante en España. No vale abstenerse, eso les daría de nuevo el poder, hay que votar en contra de quien mantiene esas posturas facistoides que nos vienen demostrando en el quehacer diario.

Por otra parte, la oposición sigue haciendo una, valga la redundancia, oposición laxa, flojita, sin imaginación y sin saltar a la acera del pueblo.

Tampoco atienden a la demanda de los ciudadanos, también están sordos, o también se mueven por intereses ocultos y negados al populacho. Quizás, en el fondo, están tan sujetos por el dios dinero como los otros, lo que hace que tampoco pueden dar el salto.

Siempre me he confesado votante de izquierdas y quisiera poder seguir siéndolo, pero empiezo a pensar que tampoco me están representando.

Nos hace falta una renovación de la clase política, que ya se que no les gusta que se les iguale por lo bajo, y dejar entrar sangre nueva, cabezas imaginativas que sean capaces de buscar soluciones originales a problemas tan mundanos como devolver los prestamos de usura de la gran banca y la gran Europa, a dar solución a esas condiciones insoportables impuestas desde la troika... A decir que no...

Ya esta bien de favorecer siempre a los mismos. Ya esta bien de abusos y de leyes que solo sirven para desamparar, aun más, al pueblo. Ya basta de recortes, de subidas de impuestos y de mentiras.

Cuanta razón amparaba a Anguita en su ya histórica frase...

Si no actuamos, la convertiremos en la verdad. Tendremos lo que nos merecemos…

Jose Ramiro, bloguero

2 comentarios:

  1. Así es, la vergüenza nacional ya no es el gobierno de turno, sino los votantes que lo ratifican en las urnas...como dice mi vecina: "hija, una república bananera es lo que parece esto"...

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  2. Pues yo, que soy gallega, asisto con estupor a los resultados de esta encuesta del CIS. Es cierto, tenemos lo que nos merecemos. Lo triste es que padezcamos a este atajo de sinvergüenzas, los que nunca les hemos votado ni les votaremos. ¡Ojalá se equivoquen las encuestas!, pero probablemente no. En Galicia no se equivocarán. Lo que decía Anguita...

    Un saludo

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